Las mejores frases y reflexiones de Blaise Pascal

Blaise Pascal (1623-1662) fue un matemático, físico, filósofo, teólogo católico y apologista francés. Sus contribuciones a la matemática y a la historia natural incluyen el diseño y construcción de calculadoras mecánicas, aportes a la teoría de la probabilidad, investigaciones sobre los fluidos y la aclaración de conceptos tales como la presión y el vacío.

Firma de Blaise Pascal:

FRASES COMENTADAS:

1. Por muchas riquezas que el hombre posea y por grandes que sean la salud y las comodidades que disfrute, no se siente satisfecho si no cuenta con la estimación de los demás.

¿No es ridículo? La estima y la opinión de los demás sobre nosotros, es algo que escapa de nuestro control. Por mucho que quieras agradar a alguien, si esa persona desea pensar mal de ti, así será siempre. Si intentas agradar a una persona te pierdes a ti mismo. No hay que tratar de agradar a nadie más sí ser agradable de manera natural.


2. Estando siempre dispuestos a ser felices, es inevitable no serlo alguna vez.

Sin embargo, también pasa justo lo contrario. Si quieres estar triste, no te faltarán motivos para estarlo. Así se simple y rápido. Mejor ríe y busca el momento de ser agradecido y la felicidad, si es lo que deseas, vendrá más fácil a ti.


3. Cuando no se ama demasiado no se ama lo suficiente.

Es decir, si haces algo, hazlo bien y mucho. Calidad y, si se puede, cantidad.


4. Nuestra naturaleza está en movimiento. El reposo absoluto es la muerte.

O dicho de otra manera: el movimiento es salud. Hasta la Tierra que parece estática, se está moviendo. El mar, las nubes… todo está en movimiento. Por eso, hay que movernos y avanzar con firmeza.

OTRAS FRASES GENIALES DE BLAISE PASCAL:

1. ¿Puede haber algo más ridículo que la pretensión de que un hombre tenga derecho a matarme porque habita al otro lado del agua y su príncipe tiene una querella con el mío aunque yo no la tenga con él?

2. El rey está rodeado de gentes que no piensan sino en divertirlo y en impedir que piense en sí mismo. Porque, por muy rey que sea, es desgraciado si piensa en ello.

3. El espíritu cree naturalmente y la voluntad naturalmente ama; de modo que, a falta de objetos verdaderos, es preciso apegarse a los falsos.

4. Descripción del hombre: dependencia, deseo de independencia, necesidad.

5. El hombre tiene ilusiones como el pájaro alas. Eso es lo que lo sostiene.

6 Cuando leemos demasiado deprisa o demasiado despacio, no entendemos nada

7. Nuestra imaginación nos agranda tanto el tiempo presente, que hacemos de la eternidad una nada, y de la nada una eternidad

8. No poseemos la verdad ni el bien nada más que en parte y mezclados con la falsedad y con el mal

9. Es miserable saberse miserable, pero es ser grande reconocer que se es miserable

10. Por muchas riquezas que el hombre posea y por grandes que sean la salud y las comodidades que disfrute, no se siente satisfecho si no cuenta con la estimación de los demás

11. Cuando no se ama demasiado no se ama lo suficiente

12. La elocuencia es una pintura del pensamiento, y por esto los que después de haber pintado añaden algo más, hacen un cuadro en lugar de un retrato.

13. En las religiones es preciso ser sinceros; verdaderos paganos, verdaderos judíos, verdaderos cristianos

14. Para quienes no ansían sino ver, hay luz bastante; más para quienes tienen opuesta disposición, siempre hay bastante oscuridad

15. ¿Quién se siente desgraciado por no ser rey, sino un rey destronado?

16. La moral es la ciencia por excelencia; es el arte de vivir bien y de ser dichoso

17. Toda religión que no afirme que dios está oculto, no es verdadera

18. El hombre es naturalmente crédulo, incrédulo; tímido, temerario.

19. Es sin duda un mal, estar lleno de defectos; pero es todavía un mal mayor estar lleno de ellos y no quererlo reconocer, porque es añadir todavía el de una ilusión voluntaria

20. El que cree tener razón entre todas las cosas, la razón de las cosas desconoce

21. ¿Por qué la costumbre no es natural? Mucho me temo que la naturaleza no es más que una primera costumbre, como la costumbre es una segunda naturaleza

22. El ajedrez es el gimnasio de la mente

23. El hombre está dispuesto siempre a negar todo aquello que no comprende

24. ¿Qué es el hombre dentro de la naturaleza? Nada con respecto al infinito. Todo con respecto a la nada. Un intermedio entre la nada y el todo

25. Vale más saber alguna cosa de todo, que saberlo todo de una sola cosa

26. Los que poseen el espíritu de discernimiento saben cuanta diferencia puede mediar entre dos palabras parecidas, según los lugares y las circunstancias que las acompañen

27. Los mejores libros son aquellos que quienes los leen creen que también ellos pudieron haberlos escrito

28. Poca cosa nos consuela porque poca cosa nos aflige

29. Es más fácil soportar la muerte sin pensar en ella, que soportar el pensamiento de la muerte

30. La conciencia es el mejor libro moral que tenemos

31. La reina del mundo es la fuerza y no la opinión; pero es la opinión la que usa la fuerza

32. Muy débil es la razón si no llega a comprender que hay muchas cosas que la sobrepasan

33. Nuestra naturaleza está en movimiento. El reposo absoluto es la muerte

34. La felicidad es un artículo maravilloso: cuanto más se da, más le queda a uno

35. La desgracia descubre al alma luces que la prosperidad no llega a percibir

36. Estando siempre dispuestos a ser felices, es inevitable no serlo alguna vez

37. La naturaleza tiene perfecciones para demostrar que es imagen de Dios e imperfecciones para probar que sólo es una imagen

38. La razón obra con lentitud, y con tantas miras, sobre tantos principios, que a cada momento se adormece o extravía. La pasión obra en un instante

39. Sólo conozco dos tipos de personas razonables: las que aman a dios de todo corazón porque le conocen, y las que le buscan de todo corazón porque no le conocen

40. Ni la contradicción es indicio de falsedad, ni la falta de contradicción es indicio de verdad

41. ¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo si pierde su alma?

42. No vivimos nunca, sino que esperamos vivir; y disponiéndonos siempre a ser felices, es inevitable que no lo seamos nunca

44. El arte de persuadir consiste tanto en el de agradar como en el de convencer; ya que los hombres se gobiernan más por el capricho que por la razón

45. Sólo hay dos clases de personas coherentes: los que gozan de dios porque creen en él y los que sufren porque no le poseen.

46. La grandeza de un hombre está en saber reconocer su propia pequeñez

47. A fuerza de hablar de amor, uno llega a enamorarse. Nada tan fácil. Nada tan fácil. Esta es la pasión más natural del hombre

48. Sabed que el hombre supera infinitamente al hombre

49. ¿Por qué me matas? ¿Y qué, no estás al otro lado del agua? Amigo mío, si estuvieras de este lado sería injusto matarte y yo sería un asesino. Pero, como estás al otro lado, esto es justo y yo soy un valiente. ¡Bonita justicia la que tiene por límite un río!

50. Dos excesos: excluir la razón, no admitir más que la razón

51. El hombre está lleno de necesidades; y no ama sino a aquellos que pueden satisfacerlas todas

52. Justicia, fuerza. Es justo que lo justo sea obedecido, es necesario que lo más fuerte sea obedecido. La justicia sin la fuerza es impotente; la fuerza sin la justicia es tiránica; la justicia sin fuerza encuentra oposición, porque siempre hay malvados; la fuerza sin la justicia es indeseada. Hay, pues, que unir la justicia y la fuerza, y conseguir así que lo justo sea fuerte, y que lo fuerte sea justo

53. La justicia sobre la fuerza, es la impotencia, la fuerza sin justicia es tiranía

54. Lo último que uno sabe, es por dónde empezar

55. He redactado esta carta más extensa de lo usual porque carezco de tiempo para escribirla más breve

56. Aquel que duda y no investiga, se torna no sólo infeliz, sino también injusto

57. Prefiero equivocarme creyendo en un dios que no existe, que equivocarme no creyendo en un dios que existe. Porque si después no hay nada, evidentemente nunca lo sabré, cuando me hunda en la nada eterna; pero si hay algo, si hay alguien, tendré que dar cuenta de mi actitud de rechazo

58. Una de las principales enfermedades del hombre es su inquieta curiosidad por conocer lo que no puede llegar a saber

59. La curiosidad no es más que vanidad. En la mayoría de los casos, sólo queremos saber algo para hablar de ello

60. El corazón tiene razones que la razón no entiende

61. El egoísta odia la soledad

62. El amor no tiene edad; siempre está naciendo

63. Ya se han escrito todas las buenas máximas. Sólo falta ponerlas en práctica

64. Sólo se es verdaderamente feliz cuando se sueña con la felicidad

65. Pintar el amor ciego es una sinrazón de los poetas; es preciso quitarle la venda y devolverle para siempre la alegría de sus ojos

66. El hombre se supera a sí mismo infinitamente porque siempre está en camino hacia la plenitud infinita

67. ¿Es la prisa la pasión de los necios?

68. Estando siempre dispuestos a ser felices, es inevitable no serlo alguna vez.