Virginia Woolf (1882-1941) fue una escritora, autora de novelas, cuentista y creadora de obras teatrales de origen inglés. Fue una de las influencias más poderosas del feminismo durante el siglo XX; así mismo, se convirtió en una de las representantes más destacadas del movimiento vanguardista modernismo anglosajón.
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FRASES COMENTADAS:
1. Uno no puede traer hijos a un mundo como este; uno no se puede plantear perpetuar el sufrimiento, ni aumentar la raza de estos lujuriosos animales que no poseen emociones duraderas, sino sólo caprichos y banalidades que ahora te llevan hacia un lado y mañana hacia otro.
Una visión pesimista del mundo, de la vida y de la raza humana. Sin embargo, no deja de tener una profundidad exquisita. Ciertamente, vivimos en un mundo superficial y carente de valores. ¿Crees que es bueno traer hijos a un mundo cruel? Tener hijos es hermoso, pero no deja de ser cierto que el mundo no es un lugar seguro ni plácido.
2. Si se atuvieran a la propia experiencia, sentirían siempre que eso no es lo que quieren, que no hay nada más aburrido y pueril e inhumano que el amor, pero que, al mismo tiempo, es bello y necesario.
Otro pensamiento pesimista o realista, según se quiera mirar. Lo cierto es que vivimos una época donde enamorarte de alguien se puede considerar un deporte de alto riesgo. De diez matrimonios, después de cinco años, solo seguirán unidas tres parejas. Por lo tanto, es más fácil encontrar corazones rotos, que gente feliz por tener una relación sana y duradera.
3. Es la escritura, no el ser leído, lo que me emociona. La alegría está en el hacer.
Y se puede aplicar a todo en nuestra vida. Olvidarnos del resultado y enfocarnos en la creación, en el trabajo y fluir con ello.
4. Todo es efímero como el arcoíris.
Hermosa manera de definir la brevedad de todas las cosas y, entre ellas, la vida. Por eso, lo sabemos, hay que vivir con total dedicación y agradecimiento. Enfocarnos en el tiempo presente.
5. No hay necesidad de apresurarse. No hay necesidad de brillar. No es necesario ser nadie más que uno mismo.
Vivimos en un mundo donde para ser «alguien» necesitas ser reconocido y tener muchos seguidores. Si no demuestras en Instagram lo «fabulosa» que es tu vida, simplemente, parece que no eres nadie ni vales nada. Y mucha gente, busca validación externa continuamente. Como dice Virginia, no es necesario ser nadie más que uno mismo.